Marte, en el plano personal, es el planeta asociado a la asertividad y la autoafirmación a través de la clase de fuerza que indique el signo donde se halla (mental, física…). La intensidad y proporción con que se ejercen estas funciones puede llevarlas desde lo constructivo a lo destructivo, pero sea como sea, la acción de Marte se entiende en lo esencial, franca, abierta, visible. En lo social, colectivo, es conocida su asociación a la guerra, el estamento militar, las fuerzas de seguridad, mercenarios, delincuencia y elementos coercitivos de todo tipo y todo aquello que suponga la imposición de la fuerza. Marte es uno de los dos planetas maléficos por su naturaleza intrínseca y por lo tanto, tiende a hacer “daño”, aunque no cabe duda de que también es necesaria su intervención en el equilibrio ‘cósmico’ de fuerzas por lo que su contribución, dependiendo del contexto, puede ser también positiva. En positivo, Marte simboliza la fuerza que se ejerce para defender y proteger y también la destreza técnica.

Marte, el planeta de la guerra, lleva semanas muy cerca del Sol. Tanto, que la luz del astro lo oculta. A una distancia de entre 15-18º y 8º 30′ de arco del Sol, se dice que un planeta está ‘bajo los rayos’, es decir, poco visible, semi velado. A partir de los 8º 30′ hasta la unión exacta, se dice que un planeta está ‘combusto’. La combustión hace que la acción del planeta sea ya mucho menos evidente en algunos momentos, o incluso pase totalmente desapercibida en otros. Antiguamente, cuando había interés que determinadas acciones quedaran en secreto, se recomendaba a los consultantes que efectuaran esas acciones cuando el planeta que las representara estuviese oculto bajo el Sol…

La conjunción entre el Sol y Marte marca el inicio de uno de los ciclos estudiados en Astrología mundana, la que trata de las dinámicas que afectan al colectivo humano. La unión de dos planetas muy dinámicos (calor y sequedad) ofrece una lectura de tensiones políticas evidentes y actitudes sociales agresivas que implican un punto de inflexión en la corriente histórica, en mayor o menor grado. Es muy difícil particularizar los efectos que esta conjunción describe, porque el mundo es muy grande y además la unión (no exacta) de ambos planetas se produce a lo largo de varios signos, pero si se trata de pautas, veremos que en general podemos percibir que la acción directa y agresiva se ha vuelto bastante discreta últimamente.

La anterior conjunción exacta del Sol y Marte tuvo lugar en 15º 30′ de Acuario el día 4 de febrero de 2011. Acuario es un signo con un potente énfasis en la identidad grupal, el intercambio intelectual y social y en el fomento de la igualdad (el Aire se mueve en sentido horizontal) y por lo tanto se opone al autoritarismo y a los gobiernos absolutos no democráticos, igual que el signo se opone a Leo, emblema de la monarquía, es decir, el gobierno que se sustenta en principios sagrados (elemento Fuego). La conjunción coincidió con el punto álgido de la revolución (Acuario) en Egipto, seis días antes de la cesión de poder presidencial (Acuario es la caída del Sol, símbolo del gobernante) por parte del presidente Mubarak, a causa de la presión popular y de los intereses de quienes pretendieron mantenerse en el poder sin la cara visible del régimen. Las protestas, que realmente empezaron en Túnez y se extendieron a gran parte del mundo árabe, algo sin precedentes, pudieron multiplicarse y extenderse rápidamente gracias a las redes sociales (Acuario); Egipto, pese a ser un país más dentro del marco de las revueltas, centró la mayor atención y la plaza de Tahrir o de La Liberación se convirtió en un símbolo. La reclamación de la ciudadanía era, precisamente, la apertura de sus sistemas de Gobierno hacia la democracia laica (la horizontalidad-igualdad del Aire, elemento de Acuario). De África y Oriente Medio, las revueltas llegaron a España, donde el movimiento 15-M se ha establecido ya como un fenómeno colectivo notable por su capacidad de organización y multiplicación, no siempre evidente, por supuesto. Aunque ha habido una clara  violencia a la hora de reprimir manifestaciones y protestas, la acción (Marte también) ha permanecido en gran medida clandestina, sobre todo en lo referente a la organización tecnológica en red (Marte combusto en Acuario) en un contexto en el que está activada la cuadratura entre Urano (tecnología) y Plutón (plutocracia, poder oculto).

Tenemos ahora una conjunción entre el Sol y Marte, pero en un signo muy diferente, Aries. Si en Acuario el énfasis está en el igualitarismo y la inteligencia colectiva, en Aries, es el individualismo extremo el que se ve destacado. Aquí el Sol ya no está débil como en Acuario, sino en su exaltación, es decir, fuerte y (en lo social) arrogante, sabedor de su poder. Marte, a su vez, se halla en su domicilio, y ya sabemos que cada cual, en su casa, hace lo que quiere, con lo que tenemos dos planetas poderosos unidos, efectuando un refuerzo mutuo. Prevalece la luz del Sol y es éste el que queda visible, pero se multiplica la sequedad por la suma de ambos planetas y por el añadido del signo de Aries, caliente y seco. La cualidad primitiva de la Sequedad es partícipe necesaria de cualquier acto de violencia, que siempre tiene como objetivo y resultado la separación (de miembros, tanto del cuerpo individual como del social). La sequedad es la ausencia de Humedad, que es el principio unificador y empático y uno de los que promueve la vida. Las bombas en el maratón de Boston, un importante evento deportivo (Marte) internacional, todavía por aclarar, ejemplifican la clase de energía clandestina que representa un Marte combusto, porque suponen la planificación y puesta en marcha secreta, clandestina, de una devastadora agresión.

Estoy convencida de que si ya de habitual se nos oculta, ahora la actividad del ámbito de Marte (agresión, defensa, ejército, seguridad, policía) que podemos apreciar es solamente la punta de un iceberg. Tenemos ejemplos cercanos: por ejemplo, podemos imaginarnos al CNI tratando de recuperar los cabos sueltos de los escándalos que afectan al Gobierno y a la corona española, el enfrentamiento entre los jueces Gómez Bermúdez y Ruz por el caso Bárcenas…  Y todo esto en el momento en que tanto el jefe de Gobierno (Rajoy) como el del Estado (rey Juan Carlos) han tenido menos presencia mediática. Ambos, cada uno por sus propios motivos, han estado apartados últimamente de la vista del público, pero no cabe duda de que su actividad entre bastidores ha debido de ser incesante, agotadora. Y centrándonos en asuntos propios de Marte, ¿alguien se ha enterado de que en Madrid se celebró, en marzo, la IV Cumbre Europea de Empresas de Seguridad Privada? O de que en el IFEMA tuvimos la misma semana el IV Salón Internacional de Tecnologías de Seguridad y Defensa? ¿O que se está elaborando una nueva Ley de Seguridad Privada? No son actividades clandestinas, pero sí que están resultando muy discretas…

He mencionado antes el margen en grados (15-18º) por el cual la cercanía de un planeta al Sol empieza a ser menos visible, que se ha llamado “bajo los rayos”. Si la distancia entre el planeta y el Sol se va estrechando a partir de esa distancia, ése es el momento del “descenso heliacal”, el inicio del proceso de ocultación del planeta bajo los rayos del Sol, que ocurrirá tiempo después, dependiendo de la velocidad a la que se produzca el acercamiento. He elegido una medida ‘media’ de 17º de arco para buscar el momento en que Marte comenzó su camino de ocultación. Resulta que me sale un día muy señalado: el 31 de enero pasado, día en que se publicaron en El País los llamados “papeles de Bárcenas“. Podemos imaginar el zafarrancho de combate que comenzó entonces (no necesariamente ese día exacto) y la guerra que se ha venido desatando fuera de la vista del público, aunque hasta nosotros lleguen de vez en cuando retazos de noticias, de las cuales, un porcentaje bastante elevado son informaciones interesadas.

La culminación de este proceso se ha producido con la conjunción exacta entre el Sol y Marte, el 18 de abril de 2013 a las 2:19:53 (CEDT). Además del reciente ataque en Boston, todavía por aclarar, ha habido la madrugada pasada (en España) una enorme explosión en una planta de fertilizantes cerca de Waco, Texas, sólo media hora después de la conjunción exacta entre Marte y el Sol, hecho no necesariamente deliberado. Las explosiones son muy representativas del ‘exceso’ de Fuego que se acumula con la combinación Sol-Marte-Aries que he mencionado antes, agravado porque en el momento de la explosión en Waco, Marte también formaba parte de otra configuración: el destructivo punto medio Marte/Plutón estaba a sólo 10′ de arco de la conjunción exacta con el planeta Neptuno, análogo a la química, gases, desintegración, desaparición y confusión.

Marte todavía tardará en emerger de los rayos del Sol, momento denominado “elevación heliacal” que, con la misma cuenta de 17º, se producirá (aproximadamente) a partir del próximo 27 de junio. Vemos, pues, que todavía hay margen para la acción belicosa, agresora, delictiva, subversiva y secreta o, como poco, discreta, del planeta Marte.